Mismatch. Cómo la inclusión da forma al diseño, la tecnología y la sociedad
Diseñar para la diversidad humana puede ser la clave para nuestro futuro colectivo. Se necesitará una gran diversidad de talentos, trabajando juntos, para hacer frente a los desafíos que se nos presentan en el siglo XXI: cambio climático, urbanización, migración en masa, mayor longevidad y envejecimiento de las poblaciones, desarrollo infantil temprano, aislamiento social, educación y el cuidado de los más vulnerables de nosotros en una brecha cada vez mayor de disparidad económica. Nunca se sabe de dónde o de quién vendrá una gran solución.
Ya hay soluciones inclusivas que, discretamente, están en marcha en nuestro mundo. Son las primeras piedras de toque para medir los resultados inclusivos. Sus características, y las personas que las crearon, comparten líneas comunes, que se recogen aquí como los tres principios del diseño inclusivo, que volverán a aparecer en los próximos capítulos:
■ Reconocer la exclusión. La exclusión ocurre cuando resolvemos problemas usando nuestros propios prejuicios.